Blog de FiraTàrrega
General 03/12/2012 Jordi Duran i Roldós
San Luís Potosí (I)
Manual de cacería de Murmurante Teatro, por ejemplo, destaca por abordar un tipo de violencia alejado de la brutalidad o el crimen que pueden reflejarse en los medios impresos locales. Su discurso se refiere a un tipo de violencia más cercana, doméstica. El espectáculo es un catálogo compuesto por seis escenas que tratan temas como el bullying, la violencia de género o la pobreza infantil. Por otra parte, No tocar y Mía son dos piezas que sorprenden por los temas que abordan y plantean al público más menudo. En Mía el alcoholismo de un padre y sus peleas con una madre encierran a una hija en un cuarto de juegos. La madre teme por su hija y la hija, angustiada, intenta sobrellevar la situación como puede, rescatando a un amigo imaginario en un muñeco. No tocar es una de las piezas de teatro infantil más impactantes que he visto últimamente. Un actor y una actriz se meten en la piel de diferentes personajes para explicarnos la historia del abuso a una menor. Los intérpretes visten ropas neutras y la escenografía es casi inexistente, solamente unos pocos elementos –objetos y colores básicos de inspiración bauhausiana- vertebran e ilustran de manera sobria pero contundente tanto personajes como situaciones en una narración muy dinámica. Sin embargo, una de las piezas que más ha dado que hablar hasta hoy lunes día 12 es la maravillosa ‘Los instantes de Luz‘, del Grupo Teatral Tehuantepec, de Oaxaca. Nos contaban compañeros de la Muestra familiarizados con la compañía que sus piezas están pensadas para ser representadas en el ámbito doméstico, en casas, patios típicos de la zona y que por lo tanto resultaba muy difícil programarlas en otros contextos. Tuvimos la suerte de que la organización del festival localizara una pequeña villa en la ciudad apta para la escenificación de la pieza y que el público de la Muestra pudiera disfrutar de su contenido. La obra recorre y ocupa diferentes espacios descubriendo la historia de un feminicidio. Se trata de un relato fragmentado, que viaja adelante y atrás en el tiempo, colándose a ratos en otros planos de realidad. Una tragedia familiar que termina con la muerte de sus tres miembros, padre, madre e hija; una tragedia brutal con elevadas dosis de poesía e interpretaciones explosivas. No cabe duda que la gran semana del teatro mejicano ha arrancado con muchísima fuerza. El programa apunta múltiples sorpresas. Se las revelo en breve. Por el momento, permítanme que continúe con mi aventura centroamericana, quedan muchos días por delante.